Nota al jefe de los fiscales de la región, Rubén Martínez,

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El jefe de los fiscales de la región, Rubén Martínez, reconoció que «la droga nos está ganando por goleada», opinó que hay que «cambiar los métodos que se están utilizando». Además coincidió con las manifestaciones del intendente Scarpín, quien sostuvo que aquí «se venden drogas como antes se vendían chupetines».

 

«Nosotros estamos preocupados, permanentemente estamos tomando contacto con las autoridades civiles, intendentes, concejales, organizaciones de la sociedad civil, tratando de coordinar esfuerzos para tratar de hacer un diagnostico, pero también para tomar las medidas que correspondan en cuanto sea materia de nuestra competencia y también sugerir algunas otras que no son de nuestra competencia. El tema de la seguridad propiamente, es decir la prevención del delito, no es competencia del Ministerio Publico de la Acusación, nosotros actuamos justamente cuando la prevención fracasa, pero sí podemos efectuar algunas recomendaciones y yo permanentemente tengo contacto con Juan González que es el jefe  y también con los otros jefes de las otras regionales porque nuestra jurisdicción comprende el Norte del departamento San Javier, que depende de la Unidad XIV de policía y la Unidad XIX de Vera, así que estamos en contacto para ver las preocupaciones. No soy un especialista en el tema seguridad, pero sí les puedo decir que cuando uno no obtiene resultados, lo que tiene que hacer es cambiar los métodos que se están utilizando… es tratar de que analicen nuevas formas de actuación, por supuesto dentro de la Ley, no podría ser de otra forma, y creo que pueden arrojar resultados más positivos».

Consultado a raíz de los allanamientos realizados la semana pasada en Reconquista, Santa Fe y la celaduría de la Unidad Regional Novena, si es normal que un preso tenga celulares indicó: «No, no, no es normal, pero que sucede, sucede. Nosotros hemos ya comprobado a través de requisas que se han hecho en varias oportunidades en la propia alcaidía, en la de Vera también, en Santa Felicia y también sabemos que en otros establecimientos carcelarios existen internos que operan con celulares, algunos simplemente para comunicarse con su familiares, y otros para realizar actividades delictivas; es decir, siguen manejando actividades delictivas desde adentro… es un tema preocupante, nosotros en la ultima reunión de la junta provincial de seguridad, estuvo el jefe, el coordinador de seguridad que se encarga del servicio penitenciario y le hicimos notar la necesidad de que se controle de una manera más estricta el ingreso de los celulares que de alguna forma ingresan, sabemos cuáles son algunas maneras de que ingresan y por ejemplo se podría poner un scanner como hay en los aeropuertos de tal manera que todo el mundo pase por el scanner y cuando este suena, si llevan un celular suena e inmediatamente seria sujeto a una requisa».

Ante la pregunta de si el profesor Valdez por el caso Rosaría Jara tenia celulares en su lugar de detención respondió que «si, tenía dos celulares bajo el colchón, por las investigaciones nosotros sabíamos que se estaba comunicando, y hay dos hipótesis muy claras, la primera es que los familiares los ingresan y otra es que pudieron ser facilitados por el mismo personal del servicio penitenciario, algún personal infiel…»

Sobre las expresiones del intendente Scarpin, quien sostuvo que en Avellaneda se vende droga como chupetines dijo: «yo comparto las opiniones de Scarpín, ahora a veces uno lo manifiesta con una comparación absurda pero comparto plenamente porque ellos, la municipalidad, sus visitadores sociales, viven a diario la problemática y la droga nos está ganando por goleada el partido, entonces es necesario que la provincia de Santa Fe, defina la política acerca de la lucha contra la droga, si ustedes leen las declaraciones del Doctor Alurralde, es coincidente con la mía, donde él dice que esta es una verdadera lucha, y que debemos tener una política definida, yo soy partidario del narcomenudeo, ya lo he dicho varias veces, porque eso implica tener una política de lucha contra la droga, ahora, si los resultados son positivos o negativos o hay que mejorarlos, eso se verá en su oportunidad pero por lo menos eso significa tener en claro que es lo que se quiere hacer contra la droga y en la lucha contra el narcotráfico».